Ayer en el trabajo, de alguna manera se nos notificó que teníamos disponible la actualización a Sonoma para el Mac.

He ido actualizando mi Mac personal desde hace más de diez años (sí, todavía uso mi Macbook Air Mid 2013) sin ningún problema. Así que que no creía que esta vez fuera diferente. Lo que sí es diferente es que ésta vez el Mac a actualizar el mi “equipo de empresa”.

De la actualización en sí fue, como esperaba, no hay nada que destacar… Le di a actualizar y al volver de comer ya estaba todo listo.

A partir de ahí, ha empezado la pesadilla.